Cuándo no hay nada
ni nadie,
Cuándo no haya padres,
hermanos,
parientes cercanos
ni amigos,
Sólo tú...
En los cielos
aún habita mi estrella
y la luna persevera
a mi lado.
Cuándo anhelo un amigo
necesito un abrazo
nadie llama a mi puerta
ni al teléfono,
jamás timbra el celular
y mi correo electrónico
se encuentra vacío,
Cuándo todos se han ido
y yo estoy tan sol@
me siento tan sol@
aquí en mi soledad.
Sólo tú...
permaneces conmigo
Sólo tú...
conmigo estás.
Proclamaré que tu amor es eterno; que tu fidelidad es invariable, invariable como el mismo cielo.
Salmo 89:2
1 comentario:
Que bello, Dios nunca nos abandona, siempre esta presente en nuestras vidas.
maravilloso leerte es como una carica para el alma.
besitos para ti querida amiga
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